Cuando llegué a Miami sentí que estaba haciendo realidad mis sueño, estaba en la ciudad que siempre había soñado, y como no trabajando con un gran productor. Todo parecía ir como tenía en mi mente, pero sin duda Dios tenía reservado para mi otro camino.

Un buen día José Luis me dijo, porque no vamos hoy a la Iglesia, y yo le dije claro por qué no? Y montamos en su coche y partimos para la Iglesia. De camino a la Iglesia, comencé a ver una cantidad de coches de tráfico que me sorprendió bastante, José Luis al darse cuenta me dijo "ves estos estos coches? Van hacia la Iglesia" y yo le dije, tanta gente?. Eso me llamó mucho la atención porque yo jamás había visto tanta gente ir la Iglesia en España un domingo normal. A continuación José Luis me dijo "la Iglesia tiene la capacidad de 7000 personas" yo le dije como? La única iglesia con tanta capacidad y con tanta afluencia de gente en el Vaticano... ahí comencé yo a sentirme algo inquieto, pero me sentí aún más inquieto cuando a lo lejos divisé la Iglesia. No era como las que yo creía que fuese, no era una iglesia católica, ya que jamás hablé con José Luis sobre religión, sólo hablamos de Jesús. Comenzó a recorrer dentro de mi un nerviosismo ya que mi desconocimiento sobre las iglesias evangélicas era total y lo único que sabía era lo que había visto en películas americanas, donde no les dan muy buena publicidad. Pero algo me decía en mi interior, tranquilo, tranquilo Alex, mira José Luis es un buen hombre, te tienes que temer?.


Entonces José Luis me dijo "cuando estemos allí si te dan ganas de llorar, llora", yo casi comienzo a partirme de risa, jamás antes había llorado en una iglesia, ni en mi comunión, ni en mi confirmación, y mucho menos en bodas o bautizos, pero no le di más importancia y me dejé llevar.


Al aparcar el coche nos dirigimos caminando hacia la entrada de la iglesia, me sorprendió mucho la amabilidad de las personas que no recibían en la entrada, con una sonrisa y una amabilidad diferente, nos dijeron "Dios les bendiga hermanos", yo simplemente sonreí y entré en la Iglesia.




Todo estaba controlado, estaba tranquilo y seguro de mí mismo, de que nada malo me iba a pasar ahí dentro, pero nada más pisar el interior de la iglesia, comencé a escuchar una hermosa alabanza a Dios, de esas que a mí tanto me gustan por el estilo de música que yo escucho, pero no fue la música lo que me sorprendió más, allí sentía una presencia que jamás había sentido antes, y ese sentimiento me hizo comenzar a llorar sin parar, sin consuelo alguno y no entendían nada. No sabía por qué estaba llorando, no estaba triste, ni con pena, pero mi interior se estaba vaciando allí. Recuerdo que José Luis me miraba y se reía, y me decía "te lo dije" y yo nada más podía decirle, no entiendo? Por qué? Qué pasa?.


Entonces tomamos asiento y comenzó el servicio, salió un hombre hablar sobre la Biblia, la palabra de Dios y sobre cómo podemos interpretarla en nuestras vidas sea cual sea nuestro trabajo estemos o no casados... jamás había escuchado a nadie hablar con esa sabiduría sobre la palabra de Dios, a ningún sacerdote, a ningún cura, este hombre hablaba con denuedo y me maravillaba. Recuerdo que en un momento, el comenzó a sentir en su espíritu personas que allí habían enfermas, con sentimientos de suicidio, y los iba nombrando conforme el sentía en el lugar de la Iglesia que estaban ubicados, y comenzaban a salir esas personas que llamaba y en ese instante yo le dije a Dios "Señor, yo no estoy enfermo ni me quiero suicidar pero me encantaría que el apóstol Guillermo Maldonado me nombre y sepa de mi presencia aquí y así sabre que para ti Señor yo también soy importante" pasó el tiempo y no me llamó, comencé a sentirme decepcionado ya que lo que había sentido allí sabía que venía de Dios. Llego el final del servicio y el apóstol Maldonado comenzó hacer un llamado a las personas que no conocían de Dios personalmente a través de su hijo Jesucristo pidió que levantarse las manos todos aquellos que fueron por primera vez a la Iglesia yo la levanté enérgicamente pero cuando pidió que saliesemos fuera todos aquellos que levantamos la mano, yo sentí vergüenza y no quería salir, entonces José Luis comenzó a empujarme y a decirme " corre, vamos, sal allí" y yo le decía no! Qué vergüenza! Pero finalmente me sacó... y estando allí cerca de 100 personas en fila frente al púlpito, el apóstol Maldonado comenzó a orar por todos nosotros, pidiendo que Jesucristo se entronara en nuestros corazones y fuésemos salvos por el poder del espíritu Santo y de Dios, y al pasar frente a mi se detuvo, me miró a los ojos y me dijo "sabes hijo, tú no estás buscando a Dios, Dios te estaba buscando aquí" y me abrazó, recuerdo ese día y ese momento como si Dios mismo me estuviese abrazando, no digo que el apóstol Maldonado fuese Dios, sino que Dios utilizó ese hombre para abrazarme. Al finalizar el servicio mucha gente de allí de la Iglesia, se acercó a mí y me dijeron "vaya, el apóstol jamás hace eso con nadie" y decidí salir a saludarlo y al verme me dijo "sin duda hijo, lo que ha pasado hoy contigo ha sido hermoso".Desde entonces nos une una amistad y cariño de padre espiritual a hijo...


Decidí entonces al fin de semana siguiente bautizarme(aunque sabia que ya me bautizaron de niño,pero como un bebe puede entender?), el día de mi bautismo fue un día especial también allí en la Iglesia, ya que fue el primer bautismo en el nuevo templo y una vez más Dios me deparó una gran sorpresa, el apóstol no suele bautizar pero como fue el primero bautismo del nuevo templo decidió ese día bautizar a los hermanos, y el eligió de entre todos a unos cuantos para bautizarnos el y entre esos estaba yo. Recuerdo que fue un día muy bonito desde muy temprano en la mañana nos citamos en la Iglesia y tuvimos una serie de charlas acerca de qué significaba realmente el bautismo y para qué servía, todas las cosas que íbamos a recibir por ello y como los iba a cambiar la vida...


Estando en la fila para ser bautizado miré al cielo y le dije al Señor "Señor aquí estoy para entregarme a tí en cuerpo y alma, lo que me vayas a dar Padre que sea también algo perceptible por mis sentidos y que sepa que algo ha cambiado en mi". Recuerdo que al salir del agua no podía caminar, me tuvieron que ayudar a salir entre dos personas y recuerdo que al caer mi cabeza sobre el hombro de un hermano entre llanto y debilidad física, comencé a balbucear palabras que no entendía, pero que nacían muy dentro de mi como algo que estaba silenciado y esperando el momento de ser activado. Y recuerdo escuchar al apóstol preguntar al hermano "está hablando lenguas?" Y el hermano respondió "si". He de deciros, que era bastante escéptico sobre todo aquello que mi mente no lograba entender cómo el don de lenguas, lo desconocía ya que no había leído la Biblia anteriormente y cuál fue mi sorpresa que después de recibir el don de lenguas pude ver y leer que eso había pasado hacía 2000 años atras a los primeros cristianos me habia pasado a mi... sabía que estaba en el camino que tanto anhelaba, ser un verdadero cristiano como Cristo quería que fuésemos, no una religión donde no se predica el Evangelio total sino más bien se predican medias verdades junto con tradiciones de hombres, fiestas paganas y cosas que al ir leyendo la Biblia son aberración ante los ojos de Dios.

Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
(Mar 16:17)

Sabéis? A través de la Iglesia evangélica, he tenido la oportunidad de encontrar el camino hacia un cristianismo puro, sin manchas, sin añadidos sólo a Cristo, la palabra de Dios y todas sus maravillas que están ahí fuera para nosotros, la creación y todos sus regalos. No por ello, he cambiado de religión, ya que no me considero evangélico, ni católico, ni ninguna etiqueta de hombres, me considero un hijo de Dios, un cristiano con la definición de seguidor de Cristo, tan sólo eso. Ahora bien, me me congrego en iglesias evangélicas porque ahí se predica la Biblia tal y como Dios le agrada, sé que hay cosas que no comparto pero sin duda alguna me siento mucho más identificado que cualquier otra religión y me gustaría dejar algo claro si yo tengo algo no es una religión es una relación co mí Padre Celestial. Y por supuesto que hay verdaderos cristianos en la iglesia catolica,los caminos de Señor son inexclutables...pero la mayoria andan errados por culpa de la cupula eclesial...

Quizás no sea un ejemplo a seguir en cuestión de si voy más o menos a la Iglesia pero lo que sí que se, es que ya no soy el mismo, Dios me ha hecho nueva criatura en Cristo Jesús y eso ni nada ni nadie, ni este mundo ni lo malo que hay en él me cambiará. Sé que estoy creciendo espiritualmente y le pido a Dios que perdone todas mis faltas, mis ofensas porque sé que él es fiel conmigo cada día de mi vida y me siento bendecido y protegido por su mano.

Quiero invitar a todo aquel que lea este testimonio que le de una oportunidad a que Jesús sea el su camino hacia la verdad y la vida en sus vidas y que estoy convencido que aquel que lo haga de corazón, es decir, con un corazón dispuesto y abierto sin prejuicios ni tradiciones lo conseguirá, sólo tu y El, verás que Padre Celestial tenemos.

Dios os bendiga y os guarde de todo mal, a partir de ahora quiero comenzar a compartir con todos vosotros revelaciones, sentimientos e inquietudes que Dios me está revelando.Se que a muchos os chocarán,para los mas consevadores soy como el hijo prodigo y para los esceptico uno mas que ha caido en la mentira religiosa,bien solo me importa lo que Dios piense de mi...Espero os sirvan mis escritos..


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En Cristo Soy:

Salvo, Sano, Libre, Guerrero, Vencedor, Heredero,Nueva Criatura,Hijo de Dios,de Otro Mundo....

BIENVENIDOS!!! A un lugar donde Dios es entronado como Padre Celestial y creador del todo y abierto a hablar sobre los temas que expongo.

Jesús de Nazaret hijo de Dios,mi salvador,mi rey,mi amigo,mi guia...te amo Señor.

Espiritu Santo,Consolador de mi vida...

Soy cristiano a secas,no me considero militante de ninguna iglesia hecha por hombres,soy parte de la iglesia universal de Cristo,no me gustan las etiquetas,pero si es cierto que si me congrego en iglesias son en iglesias evangelicas donde no ponen censura a las manifestaciones del Espiritu Santo dado que me gusta la menera de predicar el evangelio(quien somos nosotros para decidir que es cierto y que no en la Biblia,para mi todo lo escrito en ella es una verdad que se confirma asi misma,y en mi mismo).

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